Una sentencia obliga a San Sebastián a apagar las cámaras. Gijón valora las repercusiones que tiene el auto y Oviedo estima que no le afecta El Tribunal Supremo acaba de confirmar que gran parte de las sanciones cursadas mediante dispositivos de foto-rojo violan la legalidad. La sentencia está obligando a diversos municipios del país a apagar estos artilugios o invertir en su legalización. En Asturias y según datos de la Dirección General de Tráfico, los ayuntamientos tramitaron en 2014 unas 10.800 denuncias, 30 al día, por sobrepasar el semáforo cuando ya estaba encendido el disco rojo. La infracción acarrea la pérdida de cuatro puntos del carnet de conducir y el abono de una multa de 200 euros. La mayor parte de los sancionados se acogen, sin embargo, a la opción del pronto pago, lo que reduce a la mitad la penalidad. Ello supone que las arcas municipales vienen obteniendo hasta ahora entre 1 y 2,1 millones al año gracias a los foto-rojos.
Mándanos un mail
Horario de verano: del 15 junio al 1 de septiembre, ambos inclusive, de 9:00 a 14:00